Como sabéis hemos llevado nuestros vinos por primera vez a un mercadillo artesanal en Monteagudo de las Vicarías.
Pequeño pero muy animado y gente muy natural y maja.
Montamos las mesas y colocamos nuestros vinos y carteles.
Expectantes, ponemos cara de vinateros honrados y observamos a los que pasan por nuestro puesto.
Después de los anuncios por altavoz de nuestra bodega, empiezan a probar nuestro vino, el de 2018 gusta mucho, las opiniones son: es como beberse la uva, muy natural, sano, no se sube a la cabeza...
Las ventas empiezan a crecer y crecer hasta quedarnos sin botellas de 2018.
Nuestro empeño y la honestidad del vino que proponemos nos llena de alegría al ver que gusta y que la gente nota su naturalidad y nuestra maravillosa garnacha.
Gracias, abuelo Manuel, tíos Manuel y Antonio y sobre todo a José, nuestro padre, por dejarnos este maravilloso legado de la viña El Corral del Coto (Zinca "O BIEDAU" en aragonés) por el que sentimos tanta satisfacción y orgullo.
Agradecemos a los organizadores la invitación a participar en el mercadillo.